Toma nota y comienza ahora: ¡Te contamos cómo reducir esos rollitos en el abdomen!
Las mujeres por naturaleza somos más propensa a acumular grasas: gracias a esta condición podemos mostrar orgullosas nuestras fabulosas curvas (caderas, glúteos, busto y piernas).
Sin embargo, la comida “chatarra”, el estar pegada a la tele todo el día sin realizar una actividad física, y desde luego, la genética que heredamos de nuestros papás, pueden ser los responsables de una acumulación excesiva de grasa, en esa área tan crucial para nosotras.
Son muchas las alternativas que puedes elegir si lo que deseas es tener un abdomen perfecto. Nosotras te damos algunas opciones que harán que harán desaparecer poco a poco esos molestos rollitos.
1. Aumenta el aporte protéico en la última comida del día (pescado, huevos, carne roja, soya) y disminuye el consumo de carbohidratos (pan, galletas, arroz, Papas). Notarás enseguida los resultados.
2. Los masajes reductores son la mejor elección si con la dieta y el ejercicio no logras reducir tu abdomen. Los masajes mejoran la circulación local y eliminan la grasa.
3. En el mercado hay cremas reductoras específicas para el abdomen. Si están muy caras para ti, el té verde macerado con agua mineral es una alternativa natural y mucho más económica. Aplícalo con un masaje sobre el área abdominal y cúbrelo con una película de plástico durante 15 minutos.
4. Una forma de reducir abdomen haciendo ejercicio y sin causar dolores de espalda, es mediante la “reeducación postural”. Consiste en reforzar los músculos de la espalda que se pueden haber deteriorado por sentarte mal o andar como “garabato”, es decir, encorvada. Pídele a tu instructor en el gimnasio, que te indique qué ejercicios puedes realizar para reafirmar esa zona.
5. Si tu presupuesto lo permite, realízate un tratamiento intensivo a base de algas o barro para perder volumen y grasa. Te recomendamos 3 sesiones semanales durante un mes, desde luego el especialista definirá el tiempo que más te conviene.
6. Otra razón por la cual tienes “pancita” puede ser que tengas problemas digestivos o intestinales y estés acumulando gases. Suena poco agradable pero es muy normal, sobre todo si no estás llevando una dieta adecuada. Para disminuirlos debes comer lentamente, evitar los líquidos durante las comidas y disminuir el consumo de alimentos que produzcan gases (coliflor, lechuga, cebolla, legumbres y dulces).
Ya lo sabes: no tanta tele y manos a la obra. Son soluciones simples para tener un abdomen plano, estar más saludable, y verte y sentirte más linda.
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